Global Witness insta a los gobiernos de todo el mundo a implementar urgentemente protecciones mejoradas para los defensores y para que se reconozca su papel en la lucha contra la emergencia climática.
Nueve de cada 10 asesinatos registrados en 2022 se produjeron en América Latina.
Al menos 177 personas defensoras de la tierra y el medio ambiente fueron asesinadas el año pasado por intentar proteger el planeta según el nuevo informe de Global Witness en colaboración con socios de todo el mundo. Las nuevas cifras elevan el número total de asesinatos de defensores a 1.910 entre 2012 y 2022.
Colombia resultó ser el país con mayor tasa de homicidios, 60 muertes en total, lo que supone más de un tercio de todos los asesinatos a nivel mundial. A pesar de que de que Colombia ratificó un acuerdo regional clave jurídicamente vinculante en octubre de 2022 que exige que el gobierno prevenga e investigue los ataques contra defensores, esta cifra es casi el doble de la cantidad de asesinatos reportados en 2021.
El informe enfatiza que la mayoría de los homicidios registrados en 2022 se produjeron en América Latina quedando Brasil en segundo lugar con 34 asesinatos; México en tercer lugar con 31 y Honduras con 14.
CASO MÉXICO
México se ha convertido rápidamente en los últimos diez años en uno de los lugares más peligrosos para los defensores de la tierra y el medio ambiente, con 154 casos documentados durante este período 2017 7 2022. La situación general en México sigue en crisis ya que el 90 % de los ataques contra activistas, la mayoría de ellos de pueblos indígenas, han quedado impunes.
Los territorios indígenas son altamente vulnerables al prolífico número de proyectos extractivos a gran escala promovidos por empresas nacionales y extranjeras y respaldados por el gobierno mexicano. La Comisión Interamericana de Derechos Humanos ha expresado su preocupación por la falta de consultas adecuadas con las comunidades potencialmente afectadas y los ataques posteriores a quienes se oponen a los proyectos emblemáticos. La Comisión ha señalado las campañas de criminalización y difamación como amenazas dañinas contra los defensores de la tierra y el medio ambiente en México.
Si bien México ratificó el Acuerdo de Escazú en enero de 2021 y entró en vigor en abril, hay poca capacidad o presupuesto estatal para apoyar a las personas defensoras, lo que reduce las posibilidades de que las personas y las comunidades obtengan acceso a la justicia y la reparación. El Centro Mexicano de Derechos Ambientales (CEMDA) ha expresado su preocupación por la multiplicidad de factores involucrados en este contexto de impunidad, incluida la falta de cumplimiento de estándares de derechos humanos al investigar crímenes contra personas defensoras.
Laura Furones, Asesora Principal de la Campaña Defensores de la Tierra y el Medio Ambiente, dijo:
“Las investigaciones han demostrado una y otra vez que los pueblos indígenas son los mejores guardianes de los bosques y, por tanto, desempeñan un papel fundamental en la mitigación de la crisis climática. Sin embargo, están bajo asedio en países como Brasil, Perú y Venezuela por hacer precisamente eso. Todos los días escuchamos sobre nuevos ataques y nuestro informe destaca algunas de esa
¿QUÉ HACEN LOS DEFENSORES? Las tácticas y estrategias utilizadas por los Defensores varían de un grupo a otro y de una persona a otra. Sin embargo, hay un hilo común que los une a todos: todos hablan en contra del daño causado a las personas o al planeta a través de la explotación de la tierra y los recursos naturales por parte de empresas y gobiernos con fines de lucro. Esto podría realizarse a través de la sensibilización y la protesta, la acción directa pacífica, la presentación de denuncias legales u otras formas de expresarse.
LA AMOZONÍA
El análisis de Global Witness muestra que la Amazonía es uno de los lugares más peligrosos del mundo para las personas defensoras: el año pasado, en la mayor selva tropical del planeta se produjeron 39 asesinatos, más de uno de cada cinco (22 %) de los registrados en todo el mundo. Entre ellos se incluyen el del periodista británico del Guardian Dom Phillips y el de Bruno Pereira, experto en pueblos indígenas, asesinados el pasado mes de junio mientras recorrían territorio indígena en la región amazónica de Brasil. En total, desde 2014 se ha asesinado a, por lo menos, 296 personas defensoras en la Amazonía
Según el informe, los nuevos datos sobre los asesinatos de defensores no pueden captar plenamente la verdadera magnitud del problema, ya que las restricciones a la libertad de prensa y la falta de seguimiento independiente en muchos países, particularmente en África, Asia y Oriente Medio, conducen a una falta de denuncias. de asesinatos. Además, el análisis destaca que los defensores están cada vez más sujetos a otras formas de silenciamiento a través de la criminalización, con marcos legales que deberían protegerlos en lugar de convertirse en armas contra ellos, con un patrón preocupante de casos que están surgiendo en todo el mundo.
RECOMENDACIONES
El informe menciona que se requieren mediadas urgentes para hacer que las empresas y los gobiernos rindan cuentas por la violencia, la criminalización y otros ataques que enfrentan las y los defensores de la tierra y medio ambiente mientas buscan proteger sus tierra, sus comunidades y nuestro planeta.
- Garantizar acceso a la justicia
- Crear entornos seguros para que los defensores y el espacio cívico prosperen
- Informar, investigar y buscar rendición de cuentas por las represalias contra los defensores
- Promover la responsabilidad jurídica de las empresas
- Implementar un enfoque basado en los derechos para abordar el cambio climático
Consulta el informe aquí. https://www.globalwitness.org/en/campaigns/environmental-activists/standing-firm/
UNA INVESTIGACIÓN DE GLOBAL WITNESS
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